Hoy comprendemos que las bacterias y los virus causan muchas enfermedades. Nuestro cuerpo humano tiene una aptitud congénita para batallar estos antígenos con el sistema inmunitario. El sistema inmunitario se ve relacionado a numerosos puntos de nuestra vida, y uno de los que más administramos es la comida que ingerimos. Aquí hay 5 comestibles que se conoce que asisten a robustecer nuestro sistema inmunitario.
Pescado
El pescado, y más
exactamente el atún, es una destacable fuente de selenio. Una onza de atún
puede ofrecer unos 30 mcg de selenio. El selenio es un fuerte antioxidante y
forma parte a los minerales esenciales para nuestro bienestar e inmunidad.
La sugerencia de
consumo periódico es de 55 microgramos de selenio para un adulto. Otros
pescados y mariscos acostumbran tener entre 12 mcg y 20 mcg de selenio por
onza. El salmón además es una admirable selección para beneficiar al sistema
inmunitario. Tiene mucha "grasa sana" (omega-3), que se conoce que
refuerza el sistema inmunitario y decrece los peligros de enfermedades
cardíacas.
Lentejas
Si llevas una dieta
vegana o vegetariana, las lentejas son un colosal sustituto del pescado. Un
tazón de lentejas puede ofrecer unos 6 mcg de selenio. Además son una aceptable
fuente de nutrientes que refuerzan el sistema inmunitario, fibra y proteínas.
Ajo
Otra verdura que tiene
un encontronazo similar al del zinc sobre nuestro sistema inmunitario es el
ajo. El ajo tiene la propiedad, según numerosas indagaciones, de tener a raya
el resfriado (¿y a lo mejor a los vampiros?). Algunos estudios demuestran de
hecho que la gente que vive con cáncer fueron capaces de fortalecer su sistema
inmunitario incrementando su consumo de ajo.
Arándanos
Las bayas, por lo
general, están repletas de antioxidantes. Los arándanos están a la cabeza de
todas las frutas y vegetales por el número de antioxidantes que tienen dentro.
Las indagaciones no solamente demuestran el poder de los arándanos en nuestro sistema
inmunitario, sino que están unidos a un menor riesgo de grasa estomacal,
colesterol, enfermedades del corazón y cáncer.
Semillas de girasol
Las semillas de girasol
son muy ricas en vitamina E. Una onza puede ofrecer el 76% de su ingesta día
tras día, o sea, 15 mg. La vitamina E es además un fuerte antioxidante, del
mismo modo que el selenio, que asiste para “batallar” las infecciones, ya que
refuerza el sistema inmunitario.
Estos comestibles son
elementos que puedes adicionar a tus comidas, en particular cuando se aproxima
la temporada de gripe. Puedes llevar a cabo una ensalada con lentejas y
semillas de girasol con un aderezo casero de ajo para ella.